País de la ancianidad
Números 20–22
Marcos 7:1-13
En el libro Un país desconocido, la escritora Mary Pipher se encuentra con personas de más de 70, 80 y 90 años de edad que atravesaban muchas situaciones diferentes en la vida.
«Quise […] entender el país de la ancianidad», escribe Pipher. «No estamos organizados como para hacer que la vejez sea fácil». Ella señaló que el problema fundamental es que los jóvenes y los viejos se han segregado, lo cual perjudica a ambos grupos.
Esta tendencia social no es necesariamente intencional. Sin embargo, muchas personas ignoran y eluden sus responsabilidades hacia los ancianos. En la época de Jesús, los fariseos descubrieron formas creativas de evitar sus obligaciones familiares. En Marcos 7:9-13, el Señor censuró la práctica común que tenían de dedicar sus bienes materiales a Dios (al declararlas Corbán) en vez de usarlos para suplir las necesidades de sus padres. La tradición había quebrantado el mandato de honrar al padre y a la madre.
Nuestros hijos, el trabajo y las actividades de la iglesia pueden llevarnos en muchas direcciones, pero estas cosas no son excusas para dejar de honrar a nuestros padres ancianos proveyendo para sus necesidades, tanto como nos sea posible (1 Timoteo 5:8). Cuando llegue el momento en que nosotros entremos en el país de la ancianidad, esperemos haber sido el ejemplo correcto para que sigan nuestros hijos.
A honrar a los padres se aprende mediante el ejemplo.
3 Respuestas a “País de la ancianidad”
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Me encanto este devocional, Dios ha hecho grandes cosas con nuestra familia, tenemos a nuestra suegra con nosotros y es de bendicion y estoy por traer a mis padres, pero creanme, es algo impresionante como Dios bendice cuando uno honra a sus padres de una u otra manera, yo amo a mis padres y a a mi suegra y siempre oro para que Dios nos los de por un buen tiempo.
NO HAY BENDICION MAS GRANDE A NUESTROS PADRES… PERSONALMENTE POR EL MOMENTO ME ENCUENTRO LEJOS DE MI PAIS Y DE MIS PADRES Y AHORA VALORO LO Q ELLOS SON A MI VIDA, DIOS ME HA BENDECIDO TANTO CON ELLOS Q LO UNICO Q AFIRMO Q ES NO QUIERO PERDER MAS EL TIEMPO Y Q DIOS ME PREMITA AMARLES Y HONRARLES COMO ELLOS LO MERECEN… Y Q EL TIEMPO Q DIOS ME DEJE TERNERLOS CONMIGO SEA DE BENDICION JUNTOS PORQ ESTA DADIVA VIENE DE MI CREADOR…
BENDICIONES
Este artículo de hoy, me hace pensar en las bendiciones que muchos dejan de recibir por no “honrar a sus padres”; hay personas que dejan en las casa para ancianos a sus padres ya que estos, les son una carga para tenerlos bajo sus cuidados en sus casas. Tengo la bendición de tener a mi madre en casa y de verdad, DIOS hace que todas las cosa materiales sobre abunden en mi hogar. Ella vive tranquila sin que le falte absolutamente nada y tiene una señora que la cuida mientras con mi esposa salimos al trabajo. Dios le ha cumplido a mi madre la promesa de largura de dias ya que ella honro a sus padres de tal manera que a mis abuelos no les hizo falta nada. Hoy tiene 92 años y es la reina de nuestro hogar. Benditos sean todos los hijos que tengan esta oportunidad como la tengo junto a mi esposa. Cuidemos de nuestros ancianos y sobre todo si son nuestros padres. Bendiciones